Qué es
Es la inflamación del tendón aquíleo, el más fuerte del cuerpo, que se origina en el músculo gastrocnemio y soleo y se inserta en el hueso calcáneo, en el talón. La patología está más en relación con el sobreuso que con un traumatismo o causa aguda, casi siempre en deportes en los que predomina la carrera y el salto. También se ven en personas sedentarias de mediana edad.
Sintomatología
El dolor en la zona posterior del tobillo suele aparecer de forma muy lenta, lo que suele retrasar la consulta con el profesional de la salud. Es muy típico que duela en los primeros pasos de la mañana, o tras levantarnos tras un largo rato sentados en la silla. También con un zapato o zapatilla más plano o descalzos.
En corredores o deportistas normalmente duele durante los primeros pasos de la actividad, desapareciendo la sintomatología durante la actividad y empeorando tras esta.
Pruebas y exámenes
Un clínico con experiencia puede diagnosticar la patología sin realizar ninguna prueba complementaria, pero la ecografía del pie nos ofrece una visión perfecta de tendón aquíleo, el estado de sus fibras y del paratendón y la medida de su grosor, permitiéndonos encarar el tratamiento con información detallada y mejorando el pronóstico.
El análisis de la pisada es muy importante: una valoración rigurosa de la marcha nos permite conocer como funciona el pie y la articulación del tobillo, medir el rango de movimiento en dinámica y el posible diseño de unas plantillas a medida para relajar y oxigenar el tendón .
Tratamiento
Hay una serie de medidas generales que debemos realizar en presencia de inflamación en el tendón, como no hacer reposo absoluto o evitar tomar antiinflamatorios.
El tratamiento que más ha demostrado su utilidad en recuperar un tendón con este problema es el protocolo de ejercicios excéntricos que deben hacerse a diario durante 6 a 12 semanas, y con carga progresiva. Consiste en subir en el borde de un escalón con los dos pies hasta ponernos de puntillas, y desde arriba bajar lentamente solamente con una pierna que es la que trabaja en excéntrico el tendón.
Las plantillas a medida son útiles para reducir las fuerzas que actúan sobre el tendón dañado, sentando junto al ejercicio otra base del tratamiento.
Lo mejor para casos rebeldes es que hoy en posible regenerar el tendón con infiltraciones con plasma enriquecido en plaquetas y electrolisis percutánea intratisular, consiguiendo unos resultados inimaginables hace unos años y solucionando prácticamente todos los casos de tendinopatía aquílea.
En casos agudos que precisen una rapidísima incorporación a la vida deportiva, se puede hacer una infiltración volumétrica ecoguiada, eliminando las adherencias y recuperando la función indolorora de la estructura.
Si estos tratamientos no mejoran los síntomas, se puede necesitar cirugía para alargar de forma ecoguiada el músculo gastrocnemio y eliminar el origen del problema.
Expectativas (pronóstico)
En la mayoría de los casos el tratamiento conservador resuelve la patología. Los cambios en el estilo de vida ayudan a mejorar los síntomas. Tenga en mente que los síntomas pueden reaparecer si no se limitan las actividades que ocasionan el dolor o si no se mantiene la flexibilidad y la fortaleza del tendón.
Posibles complicaciones
La tendinitis aquílea puede hacer que uno tenga mayor probabilidad de sufrir una ruptura del tendón de Aquiles. Esta afección casi siempre causa un dolor agudo, como si lo golpearan en la parte posterior del talón con un garrote. Es necesaria la reparación quirúrgica. Sin embargo, la cirugía puede ser difícil debido a que el tendón no está normal.