El túnel del tarso es un túnel fibroso por el que pasa el nervio tibial posterior. La cirugía tradicional consiste en abrir la piel por detrás del maléolo interno y diseccionar cuidadosamente el nervio para liberarlo de las estructuras adyacentes. Esto provocaba bastante trauma y una recuperación lenta, con una más lenta aún vuelta al deporte. Además el riesgo de seccionar alguna rama del nervio era importante, con las secuelas que podían venir después. Falsas fascitis plantares o fascitis resistentes a todo tratamiento, dolores en la planta del pie y en la cara interna del tobillo en muchas ocasiones se deben a esta enfermedad.